El Gallo Ibérico Fotografía

Alguien me preguntó alguna vez lo que se siente estar en un photo pit y tomarle fotografías a bandas a las que uno admira y simplemente puedo decir que es lo mejor de este mundo, al menos para mi. Sin lugar a dudas es lo que más me gusta hacer en la vida, tomar fotografías y aunque soy comunicólogo de profesión, soy fotógrafo por vocación. No sé si soy bueno o malo, eso lo deciden quienes ven mi trabajo, lo que si sé es que en lo personal me ha traído grandes satisfacciones y aunque hasta ahora he cobrado por mi trabajo en muy pocas ocasiones, lo que he vivido no tiene precio.

Decidí comenzar este blog para compartir un poco de lo que he pasado en estos casi 10 años de carrera que comenzaron cuando era parte de la H.H. publicación conocida como Oz Mag, una revista de metal que aún sigue en el recuerdo de mucha gente y que para mi fue decisiva. En fin, que en este blog podrán ver algo de mi trabajo y también conocer algunas de las anécdotas que he vivido haciendo esta chamba además de una que otra cosa que se me ocurra…

Hoy estaba viendo el DVD del Monterrey Metal Fest, una edición que contiene extractos de las ediciones 1 y 2 de este fabuloso festival y me trajo tantos recuerdos que decidí compartirlos con quien quiera conocerlos, además dicen que recordar es volver a vivir así que creo que es una buena forma de hacerlo.

Este festival se llevó a cabo el 28 de diciembre de 2005 en el Auditorio Coca Cola del Parque Fundidora y fue toda una experiencia, mi segundo festival y ya iba curtidito, además Norma, una gran amiga que conocí en la primera edición me acompañó y nos la pasamos “con madre” como dicen por allá… el cartel inmenso, aquí pueden ver quienes estuvieron presentes

El lugar era espectacular y digo era porque creo que fue modificado o derruido, no lo sé bien, pero era ideal para un festival de esta magnitud, las instalaciones eran genial, es de fácil acceso y el paisaje simplemente espectacular, lo pueden ver en esta panorámica del escenario secundario durante la actuación de Jag Panzer.

Entre las cosas que recuerdo mucho de ese día fue el sol que había, y la inmensa alegría que sentí por esa razón ya que un año antes nos había tocado frío, neblina y una lluvia que no se detuvo en todo el día, así que tener un día soleado era de antología. La primera banda que pude fotografiar fue Elfonía, amigos que había conocido a través de un programa de radio que tenía hace muchos años llamado La Gárgola, particularmente a su tecladista Alejandro Millán.

La banda que abrió actividades en el escenario principal fue Into Eternity, una gran sorpresa porque no los conocía, personas muy alivianadas que pude conocer personalmente el día anterior en la tienda de Dark Vissions donde se pasearon como si nada y se tomaron fotos con toda la gente que se los pidió y durante el show el público respondió muy bien a su death metal melódico.

Ese día llegue armado con una cámara digital que compre a crédito (me costó lo de dos meses de sueldo), una humilde Sony DSC-60 de 4 Megapixeles que se portó como los grandes y me permitió hacer capturas que hoy me siguen enorgulleciendo, como esta de Ripper Owens que ese día presentó su proyecto Beyond Fear.

Los suecos de Hammerfall también estuvieron presentes y fueron de los que me reglaron las mejores tomas, todos ellos son bastante teatrales sobre el escenario y hasta me di el gusto de tomar ángulos poco comunes como este:

Por supuesto su entonces bajista Marcus Rosen ama las cámaras y no pierde oportunidad para posar con su particular apariencia estilo nomo.

Metal Church representando la vieja escuela me dejaron un gran sabor de boca, representan toda la pasión y la honestidad de los 80, esa pasión que hizo legendarias a muchas bandas de las cuales bien podrían aprender un poco más de una banda de esas que se dicen "grandes".

WASP siempre ha sido de mis bandas favoritas y ese día estuvieron enormes, a mi gusto personal, una de las mejores actuaciones del festival, Blackie Lawless impresionante y aunque se dice que es una persona poco accesible, sobre el escenario interactúa bastante con la gente.

Danzig estuvo impresionante, una de las actuaciones más esperadas de la jornada y no decepcionó a nadie.

Los maestros de Motörhead cerraron una jornada agotadora de más de 14 horas impresionantes, lo interesante es que tras la actuación de Mago de Oz, la mitad de la gente dejó el recinto y se perdieron esta gran actuación, una lástima para los que no estuvieron presentes porque se antoja dificil volver a disfrutar de su descarga.

Los discos con las fotos originales de ese día parecen haber sido tragados por un vortex espacio temporal porque nunca los encontré (aunque los sigo buscando), pero aquí dejo unas pocas fotos de ese día y espero que les traiga buenos recuerdos a los que asistieron, por que fueron de esos momentos que no se olvidan y ojala pronto podamos tener otro festival de este nivel en nuestro México Lindo y Querido....